Desde tiempos inmemoriables, el ajo ha formado parte de la dieta de distintas culturas milenarias. Y es que no es fácil resistirse a su inigualable sabor, el cual confiere a los platillos ese delicioso aroma que percibimos, principalmente cuando se está cocinando.
Se cree que tiene orígenes asiáticos y que posteriormente se trasladó al Mediterráneo, y de ahí al resto del mundo. Prácticamente todas las cocinas del mundo utilizar en ajo de alguna forma en sus platillos.
Si bien, a la gran mayoría nos encanta su sabor, el ajo posee además grandes propiedades benéficas para el organismo. Algunos estudios sugieren que el ajo ayuda a reducir el bloqueo de las arterias, así como la presión arterial y el colesterol. También contribuye a controlar los daños causados por la arterioesclerosis y el reumatismo. Además, se relaciona el consumo regular de ajo con la prevención de ciertos tipos de cáncer, como el de próstata, el de estómago, y de colon.
Si no sabes qué condimento agregar a un platillo, es casi seguro que el ajo contribuirá a mejorar su sabor. Su consumo es inocuo para prácticamente todo el mundo, y su popularidad es tal, que se han acuñado citas y refranes en torno a este.
En La Guacamaya te ofrecemos ajo granulado, el cual conserva las propiedades del ajo fresco, pero más práctico de utilizar en tu cocina. ¡Dale el punto a tus platillos con La Guacamaya! #LeDaElPunto.